Neil Stephens (52 años, Canberra) conoció la Vuelta al País Vasco primero como corredor y más tarde como director de equipos como Liberty, Banesto y Orica. Ya sabe lo que es ganar etapas con el grupo australiano, todas ellas muy parecidas y con ciclistas de caracteristícas similares.
Si preguntas a Neil cómo ve la prueba, responde «como siempre. Es una carrera interesante que tiene etapas para corredores de condiciones diferentes. Le falta una llegada como la de Vitoria, que era más de esprinters», explica el oiartzuarra.
Comienza a desgranar etapa por etapa. Tiene la carrera en la cabeza y eso es lo que quiere transmitir a sus ciclistas: «La primera etapa es muy parecida a la que ganó Swiff cuando la carrera terminó en la zona de Markina (2014). La segunda, con ese final en Garrastatxu, es una zona muy bonita. La entrada a la subida final tiene dureza y luego se suaviza. Es una ascensión con curvas, estrecha, una emboscada, buena para un ciclista tipo Purito, para un Adam Yates. Es una llegada para dar un primer paso en la general», explica.
La tercera jornada de la Vuelta al País Vasco, que llega a Lesaka, pasa muy cerca de su casa en Oiartzun: «Es un final de carrera más complicado que duro, con Aritxulegi, Agiña y la Piedad, ideal para un ciclista que tenga cierta punta de velocidad puesto que los últimos kilómetros de la etapa son llanos».
Si hay un tipo de etapa que le gusta es la que concluye en Orio: «Presenta un recorrido muy bonito, con los diferentes pasos por Aia. No es que de allí vaya a salir el ganador de la Vuelta al País Vasco, pero tiene dureza. Descartará gente, como va a suceder en todas las jornadas. Es un final que le va bien a un grupo amplio de corredores».
Esperar a la contrarreloj
Arrate lo considera un final típico «con quince corredores que pueden ganar. Quedarán tres o cuatro para disputar la general. Habrá, como siempre, dos carreras, una por la etapa y otra por la general». Lo que no ve es que el ganador final de la Vuelta al País Vasco 2016 se decida antes de la crono del último día con salida y llegada en Eibar: «Estará bastante claro quienes se van a jugar el triunfo, pero no estará decidido en Arrate».
Ha visto en varias ocasiones la contrarreloj que subirá y bajará Arrate: «La ascensión desde el polígono industrial marcará diferencias. La he inspeccionado en varias ocasiones, la primera en noviembre pasado. He probado varias bicicletas. Es un recorrido para un corredor completo, para un ciclista de fuerza, poco pesado y que suba a ritmo. Un tipo Contador, que arranca en las curvas con fuerza. Cada equipo decidirá si cambia o no de bicicleta. Yo veo tres posibilidades: hacer todo el recorrido con una cabra ligera, hacerla con una de carretera normal o salir con con la normal, cambiarla arriba y coger la cabra para la bajada. Hay que tener en cuenta que con el cambio de bicicleta se pierden diez o quince segundos. Yo me inclino por coger la cabra ligera de salida y no cambiarla».
El descenso de Arrate a Eibar puede jugar un papel decisivo: «Entiendo que la gente que sube bien baja bien, caso de Purito o Contador. Son corredores que marcan diferencias subiendo y bajan bien. Asimismo, hay ciclistas que pierden tiempo en los descensos. La he bajado unas cuantas veces y se va muy rápido. Puede marcar diferencias».
Neil tampoco tiene dudas sobre el perfil de ciclista al que le conviene la carrera: «Le va muy bien a Contador. También a Purito, que no tiene ninguna etapa que le vaya mal. Purito podría volver a ganar por el recorrido que se va a encontrar. También hay que contar con Quintana y con Henao. Hay equipos como Movistar y Sky con dos opciones en la Vuelta al País Vasco. Nosotros tenemos solo una».
Van a intentar disputarla con los hermanos Yates, Adam y Simon, «que están haciendo cosas. Simon ha sido séptimo en la París-Niza este año. En 2015 terminó quinto en la Vuelta al País Vasco, en el Dauphiné y en la Vuelta a Romandía. Fue séptimo en la París-Niza y tercero en la Vuelta a Gran Bretaña. Adam no termina de hacer bien las generales. En la Clásica del año pasado sí lo hizo. Son corredores que van creciendo y hay que apoyarles. Suben, bajan... Son valientes. Tienen todas las características para ser ciclistas de pruebas de una semana».
Con Simon intentarán de nuevo hacer una buena general: «El tipo de corredor que puede ganar pruebas de una semana o de tres es muy distinto. Para vueltas de siete días hay que ser agresivo. Las carreras terminan jugándose en pocos segundos. Hay que estar siempre muy atento en carrera y ser lo más completo posible».